Si algo caracteriza al universo de Star Wars, es la cantidad masiva de razas y criaturas que abundan a lo largo y ancho de su galaxia. Desde la primera vez que Star Wars vio la luz con el más tarde renombrado Episodio IV, Una Nueva Esperanza, se mostró esa faceta al público de forma abrumadora. ¿O quién no recuerda la famosa escena de la cantina en la que los planos saltan de criatura a criatura, no escatimando en momento alguno en dejarnos claro que el abanico que nos ofrecía la galaxia sería uno sin igual?
Esta breve mirada al pasado no se daría si no fuera porque las criaturas de las que encontraréis información en este artículo, los banthas, fueron de las primeras creaciones habidas y por haber dentro de Star Wars.
¿Qué nos dice el databank oficial?
En la página oficial de Star Wars, la descripción que nos dan de este entrañable gigante peludo es la siguiente:
Los banthas son grandes y peludos mamíferos que viajan a través de las dunas desérticas de Tatooine. Suelen servir de monturas a los merodeadores Tusken. Ambas especies comparten un vínculo muy cercano, incluso místico.
Del bantha se aprovecha todo
Los Banthas no son únicamente una montura recurrente, domesticada por los Tusken, sino que también otros habitantes de Tatooine aprovechaban a estas criaturas para tomar de ellos su carne o leche, cosa que los Tusken no hacen.
La leche de bantha es un alimento que vimos como común en el Episodio IV: Una Nueva Esperanza. Y que se ha presentado en otros momentos de la saga como algo habitual.
Su leche es muy conocida en las largas e interminables llanuras desérticas de Tatooine, además de que su carne también era consumida por muchos granjeros y recolectores, dando consigo el plato conocido como filete de bantha.
También pueden extraerse de estas criaturas suministros tales como mantequilla o ropa de su pelaje. Sus heces eran frecuentemente utilizadas como combustible, principalmente por los Tusken para poder cocinar, y todo debido a que su estiercol aguantaba durante un tiempo más que considerable el fuego.
Se cree que es una especie originaria de Tatooine, pero sin embargo se han visto similitudes de bantha en otros mundos, probablemente subespecies, tal y como el Bantha de Kashyyyk.
El bantha de Kashyyyk es ligeramente más grande que el bantha de Tatooine, pero su pelaje es más corto.
Características como especie
Además de su fácil domesticación en base a que es un animal muy dócil, los banthas tienen una altura que suele rondar los más de dos metros y medio, con un peso de aproximadamente 4 toneladas.
Los banthas solían viajar en manadas, dirigidos por la hembra más vieja.
Su alimentación es herbívora, y la razón de que puedan sobrevivir al clima tan desolador que suele recaer sobre la arena de Tatooine, se debe a que pueden pasarse semanas sin consumir comida o bebida. Su media de vida suele rondar los 100 años.
Tanto hembras como machos tenían dos cuernos grandes al frente, aunque los machos eran ligeramente más grandes, sin demasiada diferencia. Solían viajar en manadas, siendo la hembra más vieja la líder de la manada en cuestión. Pese a ello, los machos también competían entre sí para que existiera un macho alfa.
Como peculiaridad, los banthas hacían un uso de su lengua singular para no tener que inclinarse en la consumición de arbustos o plantas, al igual que para mostrar, de forma muy rudimentaria, su deseo de aparearse.
Detrás de las cámaras
George Lucas en un primer momento se inspiró en unas criaturas de John Carter on Mars, llamados Banths. Sin embargos, estas distan mucho de lo que sería el bantha que conocemos como tal.
Los Banths son unas criaturas propias de John Carter on Mars
No fue hasta más tarde que Ralph McQuarrie los diseñó, dándoles el toque de unas criaturas que bien recordaban a un caballo. Esta idea no duró mucho, puesto que evolucionó al diseño de un animal con el tamaño de un elefante.
El director de arte del momento, Leon Erickson fue quién se encargó del disfraz del bantha y usó para ello como base a un elefante. También el pelaje sería en este caso el mismo que el de un yak, teniendo así una pinta muy, muy peluda.
Su mugido sería tarea del diseñador Ben Burtt, responsable también de sonidos como los caza TIE o las espadas láser.
Debido a las dimensiones que se requerían para las criaturas banthas, se recurrió a la fisionomía del elefante.
Los banthas y sus apariciones
Siendo una de las criaturas primigenias del enorme universo que envuelve Star Wars, era de esperar que el merchandising a lo largo de más de cuarenta años ha incluído a esta entrañable bestia. Al igual que su aparición por videojuegos, novelas y a posteriori las precuelas.
Es por ello que recopilar todos los lugares en los que podemos ver a este peludo tan característico, serían interminables.
Cuando hablamos de The Bad Batch, debemos tener claro que se trata de una serie de animación con Dave Filoni como uno de los directores ejecutivos, quien fue director de supervisión en la primera fase de la serie The Clone Wars, y director ejecutivo en su segunda fase (la séptima temporada) y en Star Wars: Rebels. Dos de los otros tres productores ejecutivos también vienen bien de The Clone Wars o Rebels. Todo apunta a que la serie contará con la animación al estilo The Clone Wars.
Los protagonistas
Se conoce bien el gusto de Filoni por darle continuidad a sus historias y personajes a través de los diferentes productos en los que va siendo partícipe. Lo hizo en Rebels con Ahsoka y Rex y, de hecho, es probable que ambos vuelvan en The Mandalorian, de la que Filoni es showrunner. Y, según Kessel Run Transmission, Filoni lo volverá a hacer en The Bad Batch. Este podcast, que cuenta con información privilegiada desde dentro de Lucasfilm, afirma que Ahsoka y Rex tendrán una aparición discreta en la nueva serie y que ambos continúan su camino juntos después de sobrevivir a la Orden 66.
Como no podría ser de otra forma, la serie se centrará en los clones y en los impactos que tiene la guerra sobre ellos, siendo los claros protagonistas los miembros de la Fuerza Clon 99. Pero no solo ellos. De nuevo según Kessel Run Transmission, el Comandante Wolffe y el Capitán Gregor, los dos clones que vemos en Rebels junto a Rex en el planeta Seelos, también tendrán cuota de pantalla. Las probabilidades de ver al Comandante Rex, según afirman en el mencionado podcast, también son altas.
La ambientación y trama
Es un tiempo oscuro en la galaxia. Puede que las Guerras Clon, y toda la devastación que han traído, hayan terminado, pero en su lugar se ha alzado el terror del Imperio Galáctico, que pretende gobernar la galaxia con mano firme a través del miedo. Star Wars: The Bad Batch empezará inmediatamente después del Asedio de Mandalore, es decir, tras el final de la séptima temporada de The Clone Wars. Los clones han hecho su trabajo, ya no hay separatistas, y la inmensa mayoría de ellos han sofocado el intento de rebelión Jedi.
¿Y ahora qué ocurre con ellos? Esta serie hará un ejercicio introspectivo en los clones, en las consecuencias que ha traído la guerra para ellos, la pérdida repentina de sus Generales y Comandantes Jedi y en sus movimientos en una galaxia tremendamente cambiante. Como os hemos comentado en el anuncio de la serie, es prácticamente una secuela de The Clone Wars, pero con el foco puesto totalmente en los soldados clon.
En el podcast Kessel Run Transmission se ha dicho que no se cree que vayamos a ver una Bad Batch Imperial. Pero lo cierto es que no podemos saber nada con certeza. ¿Serán parte del Imperio, desertarán como Rex, ejecutarán la Orden 66? Tenemos hasta 2021 para especular.
Lo que sí parece más claro es que veremos a Rex en busca de otros clones, lo que casa con las apariciones de Gregor y Wolffe. Al fin y al cabo, no conocemos cómo estos dos últimos clones actuaron durante la Orden 66 y acabaron junto a Rex en Rebels. Y luego está el Comandante Cody, compañero y amigo de Rex, como bien queda reflejado precisamente en el arco de la Bad Batch en The Clone Wars. Cody se mantuvo leal a la República, ejecutó la Orden 66 contra su General, Obi-Wan Kenobi, y lo dio por muerto en Utapau. ¿Será una especie de villano?
Algo que seguramente el público espera es conocer más sobre el destino de Rex y Ahsoka tras estrellarse el Venator y dar sepelio a los que una vez fueron sus compañeros de batalla. Según Kessel Run Transmission, siguen juntos, así que está por ver qué contexto se les da a los personajes entre The Clone Wars y Rebels.
Hay que remarcar que las apariciones de Rex, Ahsoka y los demás clones apuntan a ser discretas, guiños, tramas secundarias. En todo caso, la serie va sobre el «lote malo» y es esperable que el foco se centre en ellos. Sin duda, lo más interesante será ver qué le sucede a este curioso escuadrón durante la Orden 66 y el Alzamiento del Imperio. En cuanto tengamos más datos contrastados, os los haremos saber. Mientras tanto: ¡a imaginar!
Es oficial: Disney y Star Wars confirman que una serie animada centrada en la Bad Batch, que ya vimos en el primer arco de la séptima temporada de The Clone Wars, estará disponible en Disney + en algún momento del año próximo, siendo Dave Filoni el productor ejecutivo.
Los productores ejecutivos, junto a Dave Filoni, quien ya actuó como tal en la séptima temporada de The Clone Wars, en Star Wars: Rebels y más recientemente en The Mandalorian, serán Athena Portillo (Star Wars: The Clone Wars y Star Wars: Rebels), Brad Rau (Star Wars Rebels y Star Wars Resistance) y Jennifer Corbett (Star Wars: Resistance). La coproducora ejecutiva será Carrie Beck (The Mandalorian yStar Wars: Rebels) y Josh Rimes será el productor (Star Wars Resistance). El director supervisor, papel de Dave Filoni en la primera etapa de The Clone Wars, será también Brad Rau, y del guión se encargará Jennifer Corbett.
No es una secuela de The Clone Wars, pero casi
Según ha confirmado la página web oficial de Star Wars, la serie continúa la historia de la Fuerza Clon 99 «mientras se abren camino en una galaxia que cambia rápidamente tras el final de las Guerras Clon». Por tanto, descubriremos qué pasó con estos clones alterados genéticamente tras la caída de la República Galáctica, inmediatamente después del Asedio de Mandalore, precisamente lo que pedía gran parte de la audiencia tras ser introducidos en el primer arco de la séptima temporada de The Clone Wars.
Pero ahí no acaba todo: según Noah Outlaw, parte del podcast The Kessel Transmissions, quienes filtraron los rumores sobre las nuevas series animadas, la producción contará con las apariciones discretas de Ahsoka y Rex, los grandes protagonistas del Asedio de Mandalore. Y no estarán solos. Esta misma fuente ha confirmado al 100% que el clon Echo, quien se une al «lote malo» al final de su arco, y el Comandante Wolffe también contarán con protagonismo en Star Wars: Bad Batch, por lo que también puede haber conexiones con Rebels. Si bien ya conocemos la historia de Rex durante la Orden 66, nos falta todo el contexto sobre el mismo Wolffe y el soldado ARC Gregor.
The Bad Batch arc in S7 was a back door pilot for this new series as a way to get the audience familiar with these characters. Rex and Ahsoka willl also appear in a limited capacity. Production is far along and you can expect it in 2021.
En este mismo podcast, Outlaw y Corey Van Dyke han comentado que la serie estará mucho más centrada en los clones y las consecuencias que la guerra tiene sobre ellos, y que contará con un tinte «más crudo» en una «era oscura» de Star Wars.
Estas palabras de Agnes Chu, Vicepresidenta de Contenidos en Dinsey +, también dan a entender que la serie es una especie de continuación de The Clone Wars:
Puede que The Clone Wars haya llegado a su conclusión, pero nuestro compromiso con los extraordinarios creadores y artistas en Lucasfilm Animation no ha hecho más que empezar. Estamos encantados de llevar a la vida la visión de Dave Filoni sobre las nuevas aventuras de la Bad Batch
¿Qué es la Bad Batch?
La Bad Batch, o lote malo en la traducción al español, es la Fuerza Clon 99, nombrada al honor del clon defectuoso 99 y formada originalmente por cuatro clones con «defectos genéticos aprovechables»: Crosshair, especialista francotirador con una puntería asombrosa; Tech, especialista en tecnología; Wrecker, un clon de proporciones enormes con su fuerza como potencial; y Hunter, el líder del grupo, a quien su alteración genética le permitía ser hipersensible para detectar emisiones electromagnéticas.
Posteriormente, se les uniría el clon Echo, a quien ellos mismos rescatan, con la ayuda de Anakin Skywalker y el Capitán Rex, de las garras de la Tecno Unión, quien lo usaba como algoritmo para adelantarse a las tácticas republicanas en la guerra, y era ya prácticamente mitad hombre y mitad máquina. Su conocimiento interno de las líneas separatistas y su capacidad para acceder a sus sistemas lo convirtieron en un potencial activo muy importante para la Bad Batch. Cuando éstos le ofrecieron unirse a sus filas, Echo aceptó.
Aparecieron por primera vez en el universo de Star Wars hace bien poco, en la séptima temporada de The Clone Wars, pero su concepción viene de más atrás: ya aparecieron en lo que se conoce como The Clone Wars Legacy, todos aquellos episodios que ya estaban planeados, e incluso animados de forma básica, antes de la cancelación de la serie en 2012. De hecho, el primer arco de la séptima temporada estaba disponible en la web de Star Wars desde, más o menos, 2015, con una animación pobre y sin prácticamente texturas generadas.
En 2020 han vuelto, y con fuerza. No solo se ha rescatado su arco, sino que este solo ha supuesto una introducción para una serie propia. De momento, la Fuerza Clon 99 no ha aparecido en ningún otro producto de la franquicia, aunque es bien probable que eso cambie pronto.
Han pasado varios años desde el inicio del juego, ha tratado de mantenerse actualizado y llegar a mayor público, además de ofrecer nuevos retos, la rentabilidad del juego sigue siendo buena por las cifras que aportan.
La llegada del trío de cazarecompensas luminosos al juego, Mando, Cara y Greef es destacado, pero esta actualización llega acompañada también con mejoras técnicas por el camino.
El motor del juego
Puede parecer que nada ha cambiado cuando se inicia sesión, pero hay muchas actualizaciones que forman la estructura básica para diferentes mejoras futuras. Con un conjunto de herramientas unificado y API modernizado, estos cambios nos permiten acceder a más herramientas de diseño y crear un proceso más fluido para desarrollar contenido nuevo. La versión actualizada de Unity (el motor de juego utilizado para crear Galaxy of Heroes), la antigua es la 2017.4.17 y será sustituida por la 2018.4.19.
Esta mejora conseguirá que se creen mejores animaciones de personajes y escenas que realmente capturan la emoción de Star Wars. Con un nuevo sistema de partículas que mejorarán los efectos visuales que se pueden crear, desde personajes hasta menús. Algunas de esas mejoras serán visibles en los personajes de Mando o en el evento del Caballero Jedi Luke Skywalker y esperemos siga mejorando con los años.
Se ha tratado por parte del equipo de garantizar que esta versión sea fluida, dejando en esto un espacio de tiempo que permitiese que el próximo contenido salga lo más carente de errores posible. En general lo que han tratado de anunciar es que es una actualización que puede parecer que es poco, pero que tiene vistas al futuro principalmente.
Rotación de personajes
El Mandaloriano estará disponible en el tablero de Batallas de naves difícil 5-E, sin sustituir ninguna recompensa del nodo.
Cara Dune estará disponible en el tablero de Batallas del Lado Oscuro 5-E, es un añadido al nodo que reemplazará a Barriss Offee.
Greef Karga estará disponible en el tablero de Batallas de naves difícil 4-C, sin sustituir ninguna recompensa del nodo.
El Bombardero TIE Imperial comienza su rotación en paquetes y cargamentos antes de estar farmeable en un nodo.
Cambios en el Líder Supremo Kylo Ren
Teniendo en consideración la estrategia relacionada con el Líder Supremo Kylo Ren en la que Cincos obtiene una ventaja debido a una interacción involuntaria con la IA de Kylo. Se está investigando sobre este problema y es casi seguro que se tomen medidas al respecto de los resultados que suceden con estos dos personajes.
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El presente artículo está contrastado con estudios oficiales en cuestiones de género y feminismo, no trata de atacar a Star Wars. Al revés, es una defensa, una forma de verlo que nos haga ver la maravillosa afición que compartimos y como esta no menosprecia a nadie y es un Universo donde todas y todos podemos disfrutar sin complejos.
La ciencia ficción y el cine siempre han estado altamente relacionados. La ciencia ficción hasta los años 70 claro que incluía a mujeres o personajes femeninos, pero normalmente los personajes femeninos no eran quienes realizaban la acción si no quienes la recibían. Eran un sujeto pasivo de la acción para entenderlo mejor. Siempre había un aventurero de género masculino con una chica o una mujer de género femenino, a la que, por ejemplo, él salva. Ella misma ni siquiera habría intentado soltarse de las ataduras e incluso, en ocasiones, el personaje femenino sencillamente se ponía las manos en el rostro por miedo a que el personaje masculino viniera a su rescate y muriera en el intento.
Puede parecer un tanto ridículo para nuestro sentir actual, y es que, por mucho que neguemos el cambio, este existe y, aunque gradual, desde que el cine existe, este ha tenido una transformación muy importante. Inicialmente, los personajes femeninos antes de que la ciencia ficción irrumpiera eran como se han descrito, pero en torno a los años 40 y 50 del siglo XX, entraron en escena personajes femeninos distintos y rompedores.
Si se han dado cuenta, he empleado el término “personaje femenino”. Esto es debido a que las mujeres humanas se veían igual que en las otras películas, pero aparecieron personajes de ciencia ficción femeninos que eran grandes líderes, que llevaban la acción de forma independiente. El problema es que estos personajes femeninos eran casi en su totalidad las villanas de la historia y alienígenas, la Femme Fatale (mujer fatal), pero en un análisis como el presente es justo mencionar esta evolución.
¿Quién era culpable? Los directores no eran en si mismos culpables de poner este tipo de personajes, o al menos no de forma directa y única. Era un reflejo de la sociedad del momento, y es por ello que quizás el querer alterar este parámetro podía suponer el fracaso de la obra o una ruptura.
Y es en este momento cuando debemos pensar en que en cualquier medio cultural existe una asimilación, una forma de identificarte con un personaje. Imagina ser una mujer que siempre es la recompensa al final de una aventura o la dama en apuros, y nunca a la inversa. ¿Te invita a entrar, no es eso forzarte a ser eso y nada más? Eso fue el cine para una mujer en aquella época.
No obstante, podemos ahora llegar a Star Wars. Entramos en los años 70. Los personajes femeninos seguían cumpliendo el esquema anterior en todos los géneros, y en contadas ocasiones las mujeres representadas eran otra vez mujeres fatales. Humanas, sí, pero bajo el estereotipo de una Eva que le robó el paraíso a la Humanidad.
George Lucas no solo crea un icono multigeneracional y rompe con lo anteriormente visto, sino que crea un nuevo tipo de historias y guiones corales. Se trata de crear una trama donde, aunque exista un o una protagonista, el peso de la acción y la trama ni tiene que girar a su alrededor, ni tiene que ser llevado por ese personaje. Y, para 1977, aparece un personaje que, unido a esto, supuso un antes y un después de la mujer en el cine… Si aún no sabes de quién hablamos, vamos a hablar mucho de ella: Leia Organa, interpretada por Carrie Fisher.
En el mundo de la cultura visual, existe algo llamado “empoderamiento visual”. Esto es mostrar a un personaje normalmente femenino fuerte o dueña de sus acciones, siendo un reflejo de luchar contra quien le dice “no”. Volvemos a 1977 y, ahora sí, a la primera película de Lucas. Carrie Fisher interpretó a un personaje inolvidable mientras exista Star Wars.
Leia Organa es una humana que desempeña un papel político de peso y que es dueña de sus acciones. No es un sujeto pasivo de la acción, aunque lo innegable es que el protagonista de la trilogía es su hermano, Luke Skywalker. De seguro en alguna ocasión han ridiculizado o hablado mal de una afición que tenéis. El argumento de que Star Wars es feminista o una saga que apuesta por la diversidad ha tratado de ser anulado con argumentos como un resumen ridículo de la trama. Aquí un ejemplo:
“Un chico que descubre su verdadero destino va a rescatar a una princesa y acaba venciendo al mal”
Si leyésemos esta descripción sin haber visto la película es obvio pensar que imaginaríamos la clásica película-historia de un cuento. Es lo normal. Pero, si lees este artículo, lo más seguro es que conozcas la saga y hayas visto mínimo Star Wars IV. Es decir, la primera creada en 1977. Y te pregunto, ¿ese resumen hace justicia a la película y sus personajes?.
Leia Organa no solo tiene poder político: es atrevida y luchadora ante el poder de sus enemigos. Cuando es capturada, pese a que Tarkin y Vader son más que intimidadores, no se achanta lo más mínimo, sino que les planta cara e insulta ambos. Era casi impensable en el cine ver a la princesa combatir de forma alguna a sus captores.
Es cierto que es una princesa (es cierto que la realeza no es un sistema de gobierno común en Star Wars, pero en este caso el personaje tenía dicho título en ese momento) y está en apuros. Chew, Han, Luke y Obi-Wan, bien acompañados por C3PO y R2D2, viajan a la Estrella de la Muerte para rescatarla. ¿Pero qué sucede en realidad?.
Tenéis justo encima el vídeo, no alteramos la realidad de la escena. Leia salva al grupo, sin ella jamás habrían salido de allí con vida y la aventura habría acabado. Toma la acción, la lleva y los demás son sujetos pasivos de ella. Se ha invertido la balanza y puesto a un personaje femenino donde antes no se le había visto, y no es una licencia, ni una inversión constante de unos roles. Hablamos del carácter del personaje y, como decíamos, lo coral de las tramas de Lucas.
Pensemos en Star Wars VI: El Retorno del Jedi. ¿Es Luke quién desactiva el escudo en la luna de Endor? ¿Quién arroja al Emperador a las profundidades de la estación? ¿O quién realiza el disparo que la vuela? La coralidad que Star Wars tuvo de forma inédita es que un personaje secundario era tan activo como el protagonista y no tiene que ir a su lado para ayudarle en su periplo.
Leia ha supuesto mucho para las vidas de muchas personas que han visto en ella una inspiración. Hasta literalmente su último aliento, no dejó de pelear por aquello que apreciaba. Una apreciación muy buena realizada por una fan anónima es que el físico de Carrie Fisher era muy menudo y, por tanto, era un componente más que el personaje no estuviese masculinizado.
Se trata de un concepto simple. Cuando una mujer vive entre hombres, para hacerse valer, adquiere rasgos más propios de ellos, como por ejemplo la ropa en talla y formas masculinas. Un ejemplo de ello podría estar en las mujeres que ejercen la política en la época de la película, como la dama de hierro (aquella por la cual tenemos un día de Star Wars precisamente), vistiendo trajes de cortes adaptados al cuerpo masculino. O, si vamos a algo un poco más actual, Angela Merkel, la canciller alemana.
Antes de pasar al siguiente apartado del artículo, debemos hablar del tema más peliagudo para una saga que ensalza estos valores para el feminismo.
Sencillamente, se esgrime el argumento, al igual que ocurría con el simple resumen de Star Wars IV, de que una imagen como esta en una trama es puro sexismo. Bien, ¿la esclavitud existe o ha existido? Desde luego, y el componente de ser esclava sexual también, pero, nuevamente, igual que se ha defendido la malicia de un resumen pernicioso, volvemos a la carga. Leia, prisionera de Jabba en aquel momento, estrangula a su captor con la cadena que la hace prisionera y escapa.
La película no pretendió ser sexista. La industria y el marketing posterior fueron los encargados de ello, y es una interesante crítica el uso de la violencia sexual en el caso de Jabba. Es por eso que podemos decir con orgullo ser fans de la saga galáctica de Lucas. Ahora bien, las cintas incluian solo a Mon Motha y tía Beru como personajes femeninos aparte de Leia. y con muy reducido papel. En cuanto a extras, solo las otras esclavas de Jabba, nada más. Es un punto a considerar.
El personaje de Leia tuvo una influencia poderosa en el cine hasta tal punto que todos los planes de la ciencia ficción posterior cambiaron. Podéis comprobar este aporte libremente en la red. Alien: El octavo pasajero es otro de los iconos más fuertes de este género del cine. Lo que quizás te pilla de sorpresa es que el personaje que se pensó para esta película era el teniente Ripley y no la teniente. Sí, tras el estreno de Star Wars, la poderosa imagen de Leia alteró los planes para la película y se descartó al veterano Paul Newman para este papel, eligiendo una protagonista y maravillosa actriz como Sigourney Weaver para el papel. Incluso décadas más tarde, ocurriría algo similar con la saga Terminator. Iconos de la ciencia ficción que siguieron la línea marcada por nuestra heroína intergaláctica.
Padmé Amidala, ¿un paso atrás?
El mundo de los años setenta había desaparecido 20 años después. El pensamiento había evolucionado y el feminismo retomaba una nueva ola en su lucha por la igualdad. En 1999, se estrenaba Star Wars I: La Amenaza Fantasma. El inicio de las precuelas tenía algo en común con su antecesora: una cantidad limitada de personajes femeninos (aunque ya las extras fueron recurrentes en todo momento, y certifico que vi estas películas un par de veces fijándome en los detalles).
Padmé Amidala es el personaje femenino más característico y, sí, comienza siguiendo la estela de su predecesora en todos los sentidos. Si habéis visto la serie Clone Wars, se entiende perfectamente que Padmé es anulada por el personaje de Anakin, quien le da órdenes y la retiene como un objeto. El ejemplo más claro es la temporada 6, capítulo 6:
Anakin es consumido por los celos, y la culpa de ello es la muerte de su madre y la “traición” de Padmé que lo arrastra al lado oscuro. ¿Es casual que fuera en esta época? No, los datos estadísticos reflejaron un fuerte repunte de la violencia de género en la población joven. Star Wars dio una respuesta, un mensaje. Lucas es bastante reacio a hablar con respecto a su obra, y parte de eso le ha dado un halo de misterio característico donde toda interpretación es posible. Viendo lo que había logrado en una época como los setenta, no tengo duda en el mensaje que Padmé daba con su cambio.
Clone Wars y Rebels
Ahsoka fue la primera vez que pudimos ver algo más de desarrollo femenino. Además de ser carismática, fuerte y poderosa, es emocional, y nos permitió seguir sus pasos y decisiones. Filoni creó por primera vez un personaje femenino en Star Wars que se interrelacionaba con personajes de su género con naturalidad y pluralidad. Aunque no sería el único, sin duda, cualquier fan ve en ella a un personaje inolvidable y excepcional. De igual manera en el lado oscuro, consiguió lo mismo con Ventress, que ve su mejor desarrollo en la novela Discípulo oscuro en la cual Filoni participó como soporte a Christie Golden, autora de una de las mejores novelas de este universo.
La fórmula que hemos comentado en el párrafo anterior se intensifica en Rebels, donde aparecen dos personajes independientes cuya relación es orgánica como protagonistas continúas en la trama. A título personal, me enamoré de la capitana Syndulla, seguramente porque veía en ella todo lo que aprecio de Leia pero incluso a mayor escala, incluida su historia de amor. Una piloto de nervios de acero que busca el bien de la galaxia por encima de su propia vida, sin masculinización de ningún tipo y con identidad propia hundida en las raíces de su planeta.
Corta mención en el catálogo de series para Cara Dune (The Mandalorian) y Tam Ryvora (Resistance), también dos mujeres de carácter fuerte e independientes con identidad propia además de combativas, pero que, en el caso de la primera por llevar solo una temporada en juego y en el caso de la segunda por motivos de la trama, no han tenido el desarrollo tan elevado de sus compañeras de galaxia, al menos por ahora. Qi’ra por su parte no deja de ser un personaje que es víctima de una serie de circunstancias. La pequeña Omega no deja de darnos reflejo de un concepto muy interesante, una «mujer» viviendo en un mundo dominado por hombres, y es que los clones son todos de sexo masculino y es por ello que inicialmente ella no es considerado un clon, su forma de integrarse al equipo obvio está asociado a que es una niña, podrían haber generado este concepto con un clon joven comun, pero por cuestiones de enriquecimiento de la trama, ha quedado en este lugar aportando además un carácter no tan arquetípico de un soldado (que habría sido un joven clon convencional como buen descendiente de Jango).
Rey, ahora sí, ella es la protagonista
En virtud de la polémica del tuit de la cuenta oficial de Star Wars, no pude evitar cambiar de lo que quería hablar en esta sección. Vender el físico de Carrie Fisher para hacer dinero es sexismo, usar la lucha de los derechos de la mitad de la población es rastrero como poco, pero, nuevamente, la película no tiene esta intención, el marketing y la industria son cosas distintas.
Hay un pensamiento que muchas personas tienen, y es que sentirse identificado con el protagonista de una historia se basa en tener caracteres parecidos. El género, por supuesto, es parte fundamental. He demostrado mi desagrado hacia la trilogía desde que en WookieeNews analicé el tráiler que nos ponía rumbo al estreno de Star Wars IX, e, incluso al hablar de nuestro querido Galaxy of Heroes, hubo malas palabras hacía ella.
Pero jamás será la culpa del resultado una protagonista femenina. De hecho, me atrevería a decir que es lo único positivo que puedo sacar. Al final, vi la ilusión de muchas niñas al disfrazarse como la protagonista de la trilogía secuela: “nosotras también podemos ser las protagonistas”. Es una mera cuestión de justicia. ¿Acaso debería molestarnos que, tras dos trilogías con un protagonista masculino, exista uno femenino? La respuesta aquí es obvia, en sus casas les dejo la suya propia.
El fracaso de la trilogía se debió a miles de factores, aunque no cabe duda que personificados la mayoría en el artífice principal de la misma, que nunca debió tener sobre sus hombros una responsabilidad de este calibre. Rey, interpretada por Daisy Ridley (la casualidad lleva a que, por tan solo una letra, no coincida con la querida Ripley que hemos comentado aquí), consiguió abrirnos aún más el camino. Desgraciadamente, le acompañaron las peores cintas de la saga (incluyo la de los ewoks, el odio es poderoso en mí, sí).
Rey es la protagonista y es, sin duda, el sujeto activo de la acción. Empodera visualmente y está acompañada del personaje clave de este artículo, Leia Organa. Además, aunque sean secundarias, los personajes femeninos tienen ahora una cierta relevancia en la trama, como Paige Tico al volar el destructor en Star Wars VIII (sí, gracias a cierto maestro del cine su hermana hunde este concepto). Tenemos en esa misma cinta a Amylin Holdo. Es cierto que el personaje puede no gustar y parece de simple relleno, pues su desarrollo más poderoso está en la novela Leia: Princesa de Alderaan, de Claudia Grey, donde se muestra un personaje con una fortaleza de espíritu y forma de ser muy particular.
La saga nos ha acompañado siempre, y es una cuestión de mera justicia ser iguales, nacer iguales y tener igualdad de oportunidades. Espero que este artículo demuestre que Star Wars no necesita cambiar, no necesita ser destruido, ni si quiera modificado para que esto suceda. Nuestra pasión se fundamenta en algo que es digno de admiración por sus valores.
Agradecimientos por sus análisis e información a: Manuel Benítez Bolorinos(Universidad de Alicante), Alex Rivero-Maldonado (Universidad de Málaga) y Verónica A. Wilson (Universidad de Pittsburgh at Johnstown).
Star Wars está a punto de ampliar su universo con el próximo mega lanzamiento literario de `La Alta República´. A pesar de que su lanzamiento se ha retrasado hasta enero de 2021, muchos fans siguen esperando que llegue; ya que las novelas interconectadas están listas para explorar una nueva era para la franquicia de la Space Opera.
Aunque el lanzamiento está todavía muy lejos, parece que una pieza exclusiva de la novela Light of the Jedi se ha abierto camino. Lo que seguramente mantendrá la emoción de los fans bajo control.
Extracto
IGN publico en exclusiva el primer capítulo de Star Wars: La Alta República – Light of the Jedi. A continuación os dejamos un trozo del extracto:
Cover by Joseph Meehan. Credit: Lucasfilm
La Fuerza está con la galaxia.
Es la época de la Alta República: una unión pacífica de mundos afines donde todas las voces son escuchadas, y el gobierno se logra a través del consenso, no de la coacción o el miedo. Es un tiempo de ambición, de cultura, de inclusión, de Grandes Obras. La visionaria Canciller Lina Soh dirige la República desde la elegante ciudad-mundo de Coruscant, situada cerca del brillante centro del Núcleo Galáctico.
Pero más allá del Núcleo y sus muchas colonias pacíficas, está el Borde-Interior, el Medio, y finalmente, en la frontera de lo que se conoce: el Borde Exterior. Estos mundos están llenos de oportunidades para aquellos lo suficientemente valientes como para viajar por los pocos carriles hiperespaciales bien trazados que conducen a ellos, aunque también hay peligro. El Borde Exterior es un refugio para cualquiera que busque escapar de las leyes de la República, y está lleno de depredadores de todo tipo.
El Canciller Soh ha prometido llevar los mundos del Borde Exterior al abrazo de la República a través de ambiciosos programas de divulgación como el Faro de Luz Estelar. El orden y la justicia son mantenidos en la frontera galáctica por los Caballeros Jedi, guardianes de la paz que han dominado increíbles habilidades derivadas de un misterioso campo de energía conocido como la Fuerza. Los Jedi trabajan estrechamente con la República, y han acordado establecer puestos de avanzada en el Borde Exterior para ayudar a cualquiera que requiera ayuda.
Los Jedi de la frontera pueden ser el único recurso para la gente que no tiene a dónde acudir. Aunque los puestos de avanzada operan independientemente y sin asistencia directa del gran templo Jedi en Coruscant, actúan como un efectivo disuasivo para aquellos que harían el mal en la oscuridad.
Pocos pueden enfrentarse a los Caballeros de la Orden Jedi.
Pero siempre hay quienes lo intentarán…
CAPÍTULO UNO
HIPERESPACIO. LEGACY RUN – 3 HORAS PARA EL IMPACTO –
Todo está bien.
La Capitán Hedda Casset revisó las lecturas y pantallas incorporadas en su silla de mando por segunda vez. Siempre las repasaba al menos dos veces. Tenía más de cuatro décadas de vuelo a sus espaldas, y pensó que el doble control era una gran parte de la razón por la que seguía volando. La segunda mirada confirmó todo lo que había visto en la primera.
«Todo está bien», dijo, en voz alta esta vez, anunciándolo a su tripulación del puente. «Es hora de mis rondas. Teniente Bowman, usted tiene el puente».
«Entendido, capitán», respondió su primer oficial, de pie desde su propio asiento, preparándose para ocupar el suyo hasta que ella regresara de su velada constitucional.
No todos los capitanes de cargueros de larga distancia manejaban su nave como un buque militar. Hedda había visto naves estelares con suelos manchados y tuberías con fugas y grietas en sus ventanas de la cabina, lapsos que la lanzaron a su propia alma.
Pero Hedda Casset comenzó su carrera como piloto de caza en la Fuerza de Tarea Conjunta Malastare-Sullust, manteniendo el orden en su pequeño sector del Borde Medio. Empezó volando un Incom Z-24, el caza monoplaza que todos llamaban Buzzbug.
La mayoría de las misiones de acción policial, la caza de piratas y similares. Finalmente, sin embargo, se elevó para comandar un crucero pesado, uno de los buques más grandes de la flota. Una buena carrera, haciendo un buen trabajo.
Dejó Mallust JTF con distinción, y pasó a un trabajo como capitán de buques mercantes para el Gremio Byrne, su versión de un retiro relajado. Pero más de treinta años en el ejército significaban que el orden y la disciplina no estaban sólo en su sangre, sino que eran su sangre. Así que cada barco que pilotó ahora fue dirigido como si estuviera a punto de librar una batalla decisiva contra una armada Hutt, aunque sólo llevara un montón de pieles de ogrut del mundo A al mundo B. Esta nave, el Legacy Run, no fue una excepción.
Hedda se puso de pie, aceptando y devolviendo el saludo del teniente Jary Bowman. Se estiró, sintiendo que los huesos de su columna crepitaban y crujían. Demasiados años de patrullaje en pequeñas cabinas, demasiadas maniobras de alto nivel, a veces en combate, a veces sólo porque la hacía sentir viva.
El verdadero problema, sin embargo, pensó, es que esconder un mechón de pelo gris detrás de una oreja es demasiado tiempo.
Salió del puente, dejando la precisa máquina de su cubierta de mando y caminando por un pasillo compacto hacia el mundo más grande y caótico de Legacy Run. La nave era un transporte modular de carga de clase A de Kaniff Yards, casi tan viejo como ella. Eso puso a la nave un poco más allá de su vida operacional ideal, pero dentro de los parámetros seguros si estaba bien mantenida y atendida regularmente – lo cual era. Su capitán se encargó de eso.
El Run era una nave de uso mixto, clasificada tanto para carga como para pasajeros, por lo que su designación era «modular». Estaba compuesta por un enorme compartimento central, con forma de un largo prisma triangular, con ingeniería en la popa y el resto del espacio destinado a la carga. El puente se conectaba con el casco central mediante largos brazos de brazo, uno de los cuales atravesaba en ese mismo momento. En la sección central se podían acoplar otros módulos más pequeños, hasta ciento cuarenta y cuatro, que se intercambiaban en el patio dependiendo de lo que se necesitara para un recorrido determinado.
A Hedda le gustaban las cualidades variables de la nave, porque significaba que nunca sabías lo que ibas a conseguir, qué extraños desafíos podrías enfrentarte de un trabajo a otro. Ella había volado el barco una vez cuando la mitad de su carga fue reconfigurada en un enorme tanque de agua, para llevar un gigantesco pez sable desde los mares de tormenta en Spira hasta el acuario privado de una condesa en Abregado.
Hedda y su tripulación habían llevado a la bestia allí con seguridad, no fue un trabajo fácil. Pero aún más difícil fue llevar a la criatura de vuelta a Spira tres ciclos más tarde, cuando la maldita cosa se enfermó porque la gente de la condesa no tenía ni idea de cómo cuidarla. Ella le dio crédito a la mujer, aunque pagó el flete completo para enviar el pez sable a casa. Mucha gente, especialmente los nobles, lo habrían dejado morir.
Este viaje en particular, en comparación, fue tan simple como llegaron. Las secciones de carga de Legacy Run estaban llenas en un ochenta por ciento de colonos que se dirigían al Borde Exterior desde mundos centrales y coloniales superpoblados, buscando nuevas vidas, nuevas oportunidades, nuevos cielos. Podría relacionarse con eso. Hedda Casset había estado inquieta toda su vida. Tenía la sensación de que moriría de esa manera también, mirando hacia un mirador, esperando que sus ojos se posaran en algo que nunca había visto antes.
Como se trataba de un transporte, la mayoría de los módulos de la nave eran configuraciones básicas de pasajeros, con asientos abiertos que se convertían en camas que eran, en teoría, lo suficientemente cómodas para dormir. Instalaciones sanitarias, almacenamiento, unas cuantas holosecciones, pequeñas galeras, y eso era todo. Para los colonos dispuestos a pagar por el aumento de la comodidad y la conveniencia, algunos tenían cantinas automáticas operadas por droides y compartimentos privados para dormir, pero no muchos. Estas personas eran frugales. Si tuvieran dinero para empezar, probablemente no se dirigirían al Borde Exterior para tratar de rasparse un futuro. El borde oscuro de la galaxia era un lugar de desafíos tanto excitantes como mortales. Más mortales que excitantes, en realidad.
Incluso el camino para llegar hasta aquí es difícil, pensó Hedda, su mirada atraída por el remolino del hiperespacio fuera de la gran portilla que pasaba. Apartó la mirada, sabiendo que podría terminar parada allí durante veinte minutos si se dejaba absorber. No se podía confiar en el hiperespacio. Era útil, seguro, te llevaba de aquí a allá, era la clave para la expansión de la República fuera del Núcleo, pero nadie lo entendía realmente. Si tu navidroide calculaba mal las coordenadas, aunque fuera un poco, podrías terminar fuera de la ruta marcada, el camino principal a través de lo que fuera el hiperespacio, y entonces estarías en un camino oscuro que te llevaría a quién sabe dónde. Sucedió incluso en los hiperlanes bien transitados cerca del centro galáctico, y aquí, donde los buscadores apenas habían trazado ninguna ruta… bueno, era algo que había que vigilar.
Lo sacó de su mente y continuó su camino. La verdad era que el Legacy Run estaba actualmente acelerando a lo largo de la ruta más conocida y transitada hacia los mundos de la Frontera. Esto era una carrera de la leche. Las naves se movían a lo largo de este hiperlano constantemente, en ambas direcciones. Nada de que preocuparse.
Pero más de nueve mil almas a bordo de esta nave dependían de la Capitán Hedda Casset para llegar a salvo a su destino. Ella se preocupaba.
Hedda salió del corredor y entró en el casco central, emergiendo en un gran espacio circular, un lugar abierto necesario para la estructura de la nave que había sido reutilizado como una especie de área común no oficial. Un grupo de niños pateó una pelota, mientras los adultos se paraban y charlaban cerca, o simplemente se estiraban en una zona diferente a la zona en la que se despertaban cada mañana. El espacio no era elegante, sólo un punto de unión desnudo donde se encontraban varios pasillos cortos, pero estaba limpio. La nave empleaba, por insistencia de su capitán, una tripulación de mantenimiento automatizada que mantenía sus interiores limpios y sanitarios. Uno de los custodios se abría paso a lo largo de una pared en ese mismo momento, realizando una de las interminables tareas que se requieren en una nave del tamaño de la Run.
Se tomó un momento para hacer un balance de este grupo, unas veinte personas, de todas las edades, de varios mundos. Humanos, por supuesto, pero también algunos Trandoshans de piel escamosa, una familia de Bith e incluso un Ortolan, piel azul y hocico largo y las grandes y pesadas aletas que sobresalen de su cabeza… no se veían muchos de esos alrededor. Pero sin importar su planeta de origen, todos eran gente común, esperando el momento en que sus nuevas vidas pudieran comenzar.
Uno de los niños miró hacia arriba.
«¡Capitán Casset!», dijo el chico, un humano, de piel aceitunada y pelo rojo. Lo conocía.
«Hola, Serj», dijo Hedda. «¿Cuál es la buena noticia? ¿Todo bien aquí?»
Los otros niños dejaron de jugar y se agruparon a su alrededor.
«Me vendría bien un nuevo holograma», dijo Serj. «Hemos visto todo lo que hay en el sistema.»
«Todo lo que tenemos es todo lo que tenemos», respondió Hedda. «Y deja de intentar entrar en el archivo para ver los títulos con restricciones de edad. ¿Crees que no lo sé? Esta es mi nave. Sé todo lo que pasa en el Legacy Run«.
Ella aprendió adelante.
«Todo».
Serj se sonrojó y miró hacia sus amigos, quienes también, de repente, encontraron cosas muy interesantes para mirar en el absolutamente poco interesante piso, techo y paredes de la cámara.
«No te preocupes por eso», dijo, enderezándose. «Lo entiendo. Este es un paseo bastante aburrido. No me creerás, pero en poco tiempo, cuando tus padres te tengan arando campos o construyendo vallas o luchando contra rancheros, soñarás con el tiempo que pasaste en esta nave. Sólo relájate y disfruta».
Serj puso los ojos en blanco y volvió a cualquier juego de pelota improvisado que él y los otros niños habían ideado.
Hedda sonrió y se movió por la habitación, asintiendo y charlando mientras avanzaba. Gente. Probablemente algunos buenos, algunos malos, pero durante los siguientes días, su gente. Le encantaban estas Runs. No importaba lo que eventualmente pasara en las vidas de estas personas, se dirigían a la Frontera para hacer sus sueños realidad. Ella era parte de eso, y la hacía sentir bien.
La República del Canciller Soh no era perfecta, ningún gobierno lo era o podría serlo, pero era un sistema que daba a la gente espacio para soñar. No, incluso mejor. Alentaba los sueños, grandes y pequeños. La República tenía sus defectos, pero considerando todas las cosas, podría ser mucho peor.
Las rondas de Hedda duraron más de una hora: se abrió camino a través de los compartimentos de pasajeros, pero también comprobó un cargamento de tibanna líquida super enfriada para asegurarse de que las cosas volátiles estaban bien cerradas (lo estaban), inspeccionó los motores (todo bien), investigó el estado de las reparaciones de los sistemas de re circulación ambiental de la nave (en progreso y procediendo bien) y se aseguró de que las reservas de combustible todavía eran más que adecuadas para el resto del viaje con un cómodo margen además (lo estaban.)
El Legacy Run fue exactamente como ella quería que fuera. Un mundo diminuto y bien mantenido en la naturaleza, una burbuja cálida de seguridad que retenía el vacío. Ella no podía responder por lo que les esperaba a estos colonos una vez que se dispersaran en el Borde Exterior, pero se aseguraría de que llegaran allí sanos y salvos para averiguarlo.
Hedda regresó al puente, donde el teniente Bowman casi se puso de pie en cuanto la vio entrar.
«Capitán en el puente», dijo, y los otros oficiales se sentaron más derechos.
«Gracias, Jary», dijo Hedda, mientras su segundo se apartaba y volvía a su puesto.
Hedda se acomodó en su silla de mando, comprobando automáticamente las pantallas, buscando cualquier cosa fuera de lo normal.
Todo está bien, pensó.
KTANG. KTANG.
Una alarma, fuerte e insistente. La iluminación del puente se ha cambiado a su configuración de emergencia, bañando todo en rojo. A través del puerto frontal, los remolinos del hiperespacio parecían apagados, de alguna manera. Tal vez fue la iluminación de emergencia, pero tenían un… tinte rojizo. Parecía… enfermizo.
Hedda sintió que su pulso se aceleraba. Su mente se puso en modo de combate sin pensar.
«¡Informe!», ladró, sus ojos se movieron a lo largo de su propio conjunto de pantallas para encontrar la fuente de la alarma.
«Alarma generada por el navicomp, capitán», llamó su navegante, el cadete Kalwar, un joven quermiano. «Hay algo en el hiperlano. Muerto adelante. Grande. Impacto en diez segundos».
La voz del cadete se mantuvo firme, y Hedda estaba orgullosa de él. Probablemente no era mucho mayor que Serj.
Ella sabía que esta situación era imposible. Los carriles fueron seleccionados porque estaban libres de residuos potenciales, su claridad calculada a un metro de resolución. Cualquier gránulo que se pasara por alto sería detectado y evitado por los navidroides de a bordo haciendo ajustes a lo largo del vector. Las colisiones a velocidad luz a lo largo de las rutas establecidas eran absurdos matemáticos.
También sabía que aunque era imposible, estaba sucediendo, y que diez segundos no era tiempo para nada a velocidades como la del Legacy Run.
No se puede confiar en el hiperespacio, pensó.
Hedda Casset pulsó dos botones en su consola de mando.
«Prepárense», dijo, con la voz calmada. «Estoy tomando el control».
Dos palos de pilotaje salieron de los apoya brazos de la silla de su capitán, y Hedda los agarró, uno en cada mano.
Se ahorró el tiempo de un respiro, y luego voló.
El Legacy Run no era un Z-24 Buzzbug Incom, ni siquiera uno de los nuevos Longbeams de la República. Era un carguero de sesenta años al final de -si no más allá- su vida operativa, cargado a su capacidad, con motores diseñados para una aceleración y desaceleración lenta y gradual, y atracando con puertos espaciales e instalaciones de carga orbitales. Maniobraba como una luna.
El Legacy Run no era una nave de guerra. Ni siquiera cerca. Pero Hedda la voló como una.
Vio el obstáculo en su camino con el ojo y los instintos de su piloto de caza, lo vio avanzar a una velocidad increíble, lo suficientemente grande como para que tanto su nave como lo que fuera se desintegrara en átomos, polvo a la deriva para siempre a través de los hiperlanes. No había tiempo para evitarlo. La nave no pudo hacer el giro. No había espacio, y no había tiempo.
Pero la capitana Hedda Casset estaba al timón, y ella no fallaría a su nave.
El más mínimo giro de la palanca de control izquierda, y una mayor rotación de la derecha, y el Legacy Run se movió. Más de lo que quería, pero no menos de lo que creía que podía, y el enorme carguero se deslizó más allá del obstáculo en su camino, la cosa que pasaba disparando por su casco tan cerca que Hedda estaba segura de que sentía que su paso le erizaba el pelo a pesar de las muchas capas de metal y el escudo que había entre ellas.
Pero estaban vivos. No hubo impacto. La nave estaba viva.
La turbulencia, y Hedda luchó contra ella, sintiendo su camino a través de los golpes y ondas dentadas, cerrando los ojos, sin necesidad de ver para volar. La nave gimió, su estructura se quejó.
«Puedes hacerlo, vieja amiga», dijo en voz alta. «Somos un par de viejas cascarrabias y eso es seguro, pero ambas tenemos mucha vida por delante. He cuidado muy bien de ti, y lo sabes. No te defraudaré si tú no me defraudas a mí».
Hedda no falló su nave.
Le falló.
El gemido del metal sobrecargado se convirtió en un grito. Las vibraciones del paso de la nave por el espacio adquirieron un nuevo timbre que Hedda había sentido demasiadas veces antes. Era la sensación de una nave que se había movido más allá de sus límites, ya sea por recibir demasiado daño en un tiroteo o, como aquí, simplemente por ser pedida para realizar una maniobra que era más de lo que podía dar.
El Legacy Run se estaba desgarrando a sí mismo. Le quedaban segundos de vida, como mucho.
Hedda abrió los ojos. Soltó las barras de control y dio órdenes en su consola, activando el escudo del mamparo que separaba cada módulo de carga en caso de desastre, pensando que tal vez podría dar una oportunidad a algunas de las personas a bordo. Pensó en Serj y sus amigos, jugando en el área común, y en cómo las puertas de emergencia acababan de cerrarse de golpe en la entrada de cada módulo de pasajeros, atrapándolos posiblemente en una zona que estaba a punto de convertirse en vacío. Esperaba que los niños se hubieran ido con sus familias cuando sonaran las alarmas.
No lo sabía.
Simplemente no lo sabía.
Hedda miró fijamente a su primer oficial, que la miraba fijamente, sabiendo lo que estaba a punto de suceder. Saludó.
«Capitán», dijo el teniente Bowman, «ha sido un…»
El puente se abrió.
Hedda Casset murió, sin saber si había salvado a alguien.
Palabra autorizada
Además de la revelación, el outlet también consiguió entrevistar al autor de la novela, Charles Soule; quien compartió que el extracto sirve como «nuestra primera mirada al momento que cambia La Alta República para siempre».
«La destrucción del Legacy Run es el catalizador de un desastre en toda la galaxia. Fragmentos de la nave de carga destruida empiezan a salir del hiperespacio a velocidades super aceleradas, lo que significa que los mortales misiles de escombros pueden aparecer en cualquier lugar y en cualquier momento, desde el Borde Exterior hasta el Núcleo. En este momento de crisis, la República recurre a los guardianes de la paz y la justicia: los Jedi».
Soule también mencionó que Light of the Jedi mostrará un «desastre épico y una respuesta heroica y emocionante tanto de la República como de los Jedi para salvar vidas y poner fin a la crisis».
Es solo una pieza de una saga mucho más grande.
«Los primeros compases de Light of the Jedi muestran un desastre épico y una respuesta heroica y emocionante tanto de la República como de los Jedi para salvar vidas y poner fin a la crisis». Sin embargo, es solo el comienzo. El desastre de Legacy Run da inicio a una historia mucho más grande; en realidad es solo una pieza de una saga mucho más grande».
Aparte del primer capítulo y de los interesantes chismes de Soule, IGN también reveló una mirada exclusiva a un concepto de arte oficial para la tan esperada novela:
¿Qué puede significar eso?
La promesa de ver una nueva era en la franquicia de Star Wars es un buen augurio para la Alta República, ya que proporciona a los fans una nueva perspectiva sobre las historias que se desarrollan en esta galaxia muy, muy lejana.
El primer capítulo debería ofrecer pistas no sólo para la historia general sino también para el tono de la novela. Más aún, el capítulo también proporciona una explicación detallada sobre el estado actual del período de tiempo. Lo que presenta una imagen más clara para los fanáticos de Star Wars, tanto los más acérrimos como los más informales.
Un viejo conocido
El primer capítulo muestra la experiencia de Soule en la escritura de la franquicia Star Wars. Para aquellos que no lo sepan, Soule ha escrito para Marvel Comics, sobre historias centradas en Darth Vader, Lando, Obi-Wan & Anakin, Poe Dameron, y The Rise of Kylo Ren. Basándose en los comentarios de Soule, la promesa de ver cómo la Alta República cambia con el tiempo requiere una narración interesante que presumiblemente podría atraer a los fans.
El arte conceptual ofrecía una gran visión de una de las naves militares de la novela que es el Legacy Run. Soule mencionó que la destrucción de Legacy Run iniciaría una cadena de eventos que pondría a la galaxia en el limbo, lo que pone a los Jedi en una posición convincente.
Aunque no se sabe mucho sobre cómo se contará la historia, la historia está ambientada 200 años antes de La Amenaza Fantasma, ofreciendo potencialmente muchas posibilidades interesantes para avanzar.
Esto es todo por ahora. Un saludo y que la Fuerza les acompañe… ¡Siempre!